Metafísica sobre Génica




La nada y el todo. De las ruinas crece el nuevo espectáculo. La nada y el todo en un mismo segundo nacen, se desarrollan y quedan flotando con la temible convicción de que el aire que se respira ya no podrá ser igual. Dos entes, desnudos despojados, transitan el espacio de la Memoria Universal Humana, tratando de saber porqué nos pasamos la vida muertos. Los huesos pesados, la frustración a flor de piel, la bronca en los puños, títeres despedazados en esta maquinaria infernal donde los demonios queman nuestros destinos desde la televisión, las iglesias, los palacios gubernamentales y nosotros que seguimos siendo sólo ojos que observan desde la oscuridad.